Las tendencias de la computación en la nube para 2023

La adopción de la nube agiliza la transformación digital de las empresas enfocada en la modernización de los servicios, en facilitar el acceso a datos y automatizar la infraestructura para lograr acceder a nuevos modelos de negocios basados en tecnología y en transacciones de confianza.

De hecho, un informe de Alpha Beta Economics revela que 6 economías latinoamericanas (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Uruguay) ya están experimentando una inversión de US$34 billones al aumentar sus valores de exportación anuales a partir del uso de tecnologías digitales, y esta oportunidad puede cuadruplicarse para alcanzar los US$140 billones en 2030.

Precios más económicos permiten que más empresas elijan inicialmente hospedar servicios en la nube antes de pensar en inversiones en software local y también les ayuda a reducir significativamente los tiempos de implementación, los costos de gestión de infraestructura y permiten hacer pruebas de concepto/prototipos en capas de consumo gratuito. De hecho, las pymes son las más beneficiadas con la computación en la nube, ya que tienen más probabilidades de enfrentar restricciones de costos cuando se trata de invertir en infraestructura con un alto desembolso financiero.

Asimismo, en tiempos en los que el secuestro de información, el espionaje y las amenazas de seguridad se han convertido en un dolor de cabeza para las empresas, las plataformas de computación en la nube ofrecen mecanismos de cifrado y protección de datos.

TENDENCIAS

Este 2023 se puede esperar que las empresas continúen aprovechando los servicios en la nube para acceder a tecnologías nuevas e innovadoras, así como para impulsar la eficiencia en sus propias operaciones y procesos. Estas son algunas de las tendencias que podrían tener un mayor impacto:

1. Escalar servicios. Se prevé un incremento en el uso de servicios híbridos y proyectos multi nube que permitan a las empresas escalar sus servicios de manera cómoda y mucho más rentable, donde puedan priorizar el valor que aportan al mercado.

2. No es necesario contratar personal especializado. Las empresas pueden, hasta cierto punto, evitar la contratación o capacitación de fuerza laboral altamente especializada si quieren aprovechar la computación en la nube. Además, un valor de las empresas es el personal que siempre busca mantenerse a la vanguardia y en los cambios constantes, por ello ya cuentan con soluciones de computación en la nube.

3. Amenazas de seguridad. En América Latina, la seguridad y protección de datos suele ser un tema desestimado por empresas que no se encuentran en sectores regulados, pero también hay estimaciones de crecimiento en el número de ataques y, por lo tanto, en productos que garanticen la protección de la infraestructura. La mayoría de los expertos en tecnología reconocen que la nube aporta un ambiente más seguro y confiable que tener servidores locales.

4. La opción que ofrezca el precio más bajo será la elegida. Existe un fuerte componente económico como el principal factor que motiva a las empresas a considerar una migración a la nube. Se observa que los servicios de hosting/computing tienden a ser percibidos como un commodity en donde el precio más bajo será el seleccionado. Si bien no todos los servicios que se buscan son para gestión interna, apuntan más a una forma de trabajar con sistemas que operan bajo un modelo de software como servicio (SaaS, por sus siglas en inglés). Otros servicios como la gestión de datos y las plataformas de gestión de APIs empezarán a recibir mayor inversión.